SEÑAL WOW
EL ENIGMA DE LA SEÑAL WOW
La señal Wow! es el nombre que en círculos astronómicos se dio a una emisión de radio que se sospecha podría tener un origen extraterrestre.
El 15 de Agosto de 1977 por la noche, a las 23:16 horas, sucedía algo totalmente inexplicable en el antiguo observatorio Big Ear (destruído en 1998 para construir un campo de golf) del proyecto SETI (Search for Extra Terrestrial Intelligence).
Como siempre, el radiotelescopio Big Ear , se encontraba a la escucha, activo, como otros sistemas dedicados a la radioastronomía,
captando ondas de radio emitidas para seguimiento de vuelos espaciales
(generalmente no tripulados), o simplemente ondas recibidas desde el
espacio, provenientes de pulsars o quasars para estudiarlas.
Con el sistema informático de aquel entonces (un IBM 1130)
captaban las señales obtenidas por el radiotelescopio, convirtiéndola
en caracteres alfanuméricos (0, 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8, 9, A, B, C...)
que representaban la intensidad de la emisión.
Estos
radiotelescopios cuando están a la «escucha» de posibles emisiones desde
el espacio, reciben siempre un ruido de fondo (interferencias,
similares a cuando sintonizamos una emisora de radio) debido al fondo cósmico de microondas, teoría que afirma que el ruido del universo es el «eco» de la explosión del Big Bang.
Así pues, lo normal en los informes del Big Ear
era encontrar ristras de espacios en blanco (valor 0), 1, 2 o valores
similares (muy bajos) que representaban dicho ruido, y que aunque no era
constante, siempre estaba presente y necesitaba conocerse a modo de
patrón actual, para utilizar de filtro y eliminarlo, diferenciando así
la emisión pura del ruido de fondo.
Sin embargo, ese día, el Big Ear
captaba una emisión de una fuente desconocida durante 72 segundos
proveniente de la zona oeste de la constelación de sagitario: el código 6EQUJ5,
lo que representaba una intensidad totalmente fuera de lo común, 30
veces más potente que lo habitual. Lamentablemente no fue grabada pero
sí registrada por el ordenador del observatorio en una sección de papel
continuo.
El acontecimiento pasó desapercibido hasta que unos días más tarde el profesor Jerry R. Ehman de la Universidad de Ohio, que por aquél entonces trabajaba como voluntario en el proyecto SETI,
descubrió la extraña señal. Totalmente sorprendido redondeó en un
círculo la intensidad que acababa de sorprenderle, y anotó al lado su
sorpresa: WOW! (¡guau!), palabra con la que luego fue bautizada la emisión. Rápidamente, telefoneó a John D. Kraus (creador y director del Big Ear) quién tampoco daba crédito a lo sucedido.
PROFESOR JERRY R. EHMAN
La secuencia extraterrestre registrada fue 6EQUJ5, sorprendentemente 30 veces más intensa que el ruido de fondo y de la cual actualmente todavía se está investigando el origen.
El telescopio Big Ear se mantenía fijo y
hacía uso de la rotación terrestre para escudriñar el espacio, por ello
es que sólo podía observar un punto determinado del cielo por tan sólo
72 segundos. Esta es la razón que fundamenta el origen extraterreno de
la señal, ya que la misma duró exactamente 72 segundos, mostró un pico
durante los primeros 36 y luego descendió gradualmente.
POSIBLES HIPÓTESIS
A día de hoy todavía se desconoce el origen de la emisión, aunque se barajan varias hipótesis:
Interferencias:
-Un satélite artificial: Se piensa que es probable que en ese preciso instante un satélite atravesara la órbita que registraba el radiotelescopio. Sin embargo, todas las transmisiones terrestres tienen prohibido el uso de la banda de 1,4GHz (donde se emitió la señal). Además, un satélite realizaría una emisión durante un periodo mucho más corto (se desplazan a gran velocidad).
Actividad espacial:
-Acontecimiento potente: Es posible que la intensidad fuera debido a algún evento espacial desmesuradamente potente y enérgico. ¿Explosión de una supernova? La emisión se detectó sólo en determinadas frecuencias del espectro, lo que descarta en cierta forma este apartado (los cuerpos celestes emiten en todas las frecuencias).
-Planeta o asteroide: Tampoco ningún planeta había pasado cerca del origen de la señal. ¿Quizás un asteroide? Poco probable.
-Posible civilización: Sólo un potente transmisor de una civilización ajena a la tierra sería capaz de emitir una onda con tal intensidad.
A día de hoy todavía se desconoce el origen de la emisión, aunque se barajan varias hipótesis:
Interferencias:
-Un satélite artificial: Se piensa que es probable que en ese preciso instante un satélite atravesara la órbita que registraba el radiotelescopio. Sin embargo, todas las transmisiones terrestres tienen prohibido el uso de la banda de 1,4GHz (donde se emitió la señal). Además, un satélite realizaría una emisión durante un periodo mucho más corto (se desplazan a gran velocidad).
-Fallo del telescopio:
Se baraja la posibilidad de que el radiotelescopio fallara durante ese
pequeño fragmento de tiempo, aunque es bastante poco probable, ya que no
reiteró ni tuvo ningún otro tipo de problema notable durante su
existencia.
-Acontecimiento potente: Es posible que la intensidad fuera debido a algún evento espacial desmesuradamente potente y enérgico. ¿Explosión de una supernova? La emisión se detectó sólo en determinadas frecuencias del espectro, lo que descarta en cierta forma este apartado (los cuerpos celestes emiten en todas las frecuencias).
-Planeta o asteroide: Tampoco ningún planeta había pasado cerca del origen de la señal. ¿Quizás un asteroide? Poco probable.
-Posible civilización: Sólo un potente transmisor de una civilización ajena a la tierra sería capaz de emitir una onda con tal intensidad.
Pero… ¿ustedes que creen?
Fuente: Crónicas de la ciudad sin nombre
No hay comentarios:
Publicar un comentario